El Sueño y la EPOC
Dormir bien, y aún más importante descansar, es algo imprescindible para todo el mundo. Las personas con enfermedades respiratorias, como el asma o la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) pueden llegar a tener problemas mientras duermen, esto les provoca que se despierten durante la noche y se sientan cansados durante el día.1
Los pacientes a los que se les ha diagnosticado alguna de las dos enfermedades pueden llegar a tener por las noches síntomas tales como sibilancias (sonido similar a un pito o silbido), tos, sensación de opresión o falta de aire y tienen mayor riesgo de padecer apnea del sueño.1


Factores genéticos o de desarrollo pulmonar

Tos, sensación de opresión

Falta de aire

Apnea del sueño
¿Qué puedo hacer para dormir mejor?1
- Asegúrese de que su asma o EPOC estén bajo el control adecuado.
- Utilice sus medicamentos de la forma en que su médico le indique.
- Si tiene congestión nasal o reflujo ácido coméntele a su médico para que lo trate.
- Si usted es fumador le recomendamos que deje de hacerlo y así evita que sus síntomas empeoren.

La EPOC hace que los pulmones y corazón hagan mucho más esfuerzo para llevar oxígeno a todas las partes del cuerpo, por eso se les recomienda a los pacientes con EPOC que realicen rehabilitación pulmonar.1
Se trata de una rehabilitación donde se puede ayudar a reducir los efectos de la EPOC controlando o disminuyendo la falta de aire de manera que el cuerpo se sienta menos agotado por esto. La rehabilitación pulmonar le puede ofrecer.2
Ejercicios de entrenamiento estructurados y monitorizados.

Técnicas para reducir y controlar los problemas respiratorios
Apoyo emocional y psicológico

Educación sobre cómo mantener y mejorar las funciones
Es importante acompañar calidad de sueño y ejercicio con una buena alimentación. Muchos pacientes refieren que al tener EPOC presentan problemas para ganar peso y mantener la masa muscular, hay tres consejos útiles que le pueden ayudar a tener una buena nutrición.2
- Hacer pequeñas comidas a lo largo del día en vez de tres abundantes
- Beber mucho líquido, esto ayuda a que las vías respiratorias tengan un moco más ligero
- Mantener una alimentación balanceada